Reflexiones post-hospitalarias
Después de pasar un tiempo de (baja) calidad en conocido hospital local y tras beberme dos tremendos botellones de solución salina (larga historia), heme aquí para traerles algunas ideas inconexas que me estuvieron revoloteando en la cabeza durante mi estancia. Pásenle con cuidadito y espero que no se asusten.
1.- Soy muy simple. No hacen falta grandes cosas para arrancarme una risotada sincera. Un buen chiste, una anécdota entretenida, una película bien hecha, una canción jocosa. Lo que sea. Germán Dehesa dice que muchas veces los simples somos tomados por estúpidos, lo cual es muy cierto, pero bueh, ¿esos amarguetas quiénes son para entenderme/entendernos?
2.- Hoy como nunca lamenté haberme perdido el futbol...y eso que a mi ni me gusta verlo por la tele.
3.- Llegó hasta mis oídos la conversación de dos enfermeras subversivas que estaban planeando las próximas acciones de resistencia civil ante el revés que sufrió AMLO en el TRIFE. Ya me imagino: van a dejar de prestar un servicio digno y eficiente a la amable derechohabencia. ¡Pero carajos! Eso ya lo hacen...¿qué podría ser, entonces?
4.- Extraño mucho a mi abuela, todos los días lo descubro un poco más.
5.- Es increíble cuánto puede equivocarse una encuesta de preferencia electoral, sobretodo cuando están mal hechas. ¿Cuántos años (válgame Dios) AMLO punteó las preferencias electorales? Muchos, y por mucho margen. Aquí en Jalisco, Zamora del PRI punteó siempre las preferencias con mucho margen, y tómala, que pierde. Sin embargo, después de mucho pensarlo, las encuestas no se equivocan, simplemente dan a conocer un dato duro bastante inflexibla (un porcentaje) que es suceptible de error o mala interpretación cuando no se le meten algunas varibles de tipo cualitativo, más flexibles y de mayor significatividad para conocer verdaderas tendencias y patrones de votación.
6.- ¿Qué usaran para lavar las sábanas de las camas de los hospitales? ¿Cemento?
7.- Dos meses sin cigarro...voy bien, voy bien. Me acordé de una película que está próxima a estrenarse, "Favor de Fumar" sobre un cabildero de la industria tabacalera. ¡Ya me anda por verla!
8.- Si México se involucrara en una guerra a gran escala, tendría que llamar a sus reservistas. Pues bien, mi número de soldado es el C-7873500 y pertenezco a la primera reserva de 14o Batallón de Infantería. Tendría el muy poco grato honor de ser de las primeras bajas de nuestro glorioso ejército en esta hipotética guerra. Lo peor de todo esto es que cuando iba al Servicio Militar, los días que tocaba instrucción militar y uso de arma de fuego lo único que veíamos era un esquema muy feo y muy viejo del por demás obsoleto rifle calibre 7.62 mm también conocido como "Mosquetón" y que se dejó de usar hace...mmhhh...veamos...un par de guerras mundiales, si no me equivoco.
9.- Los hombres somos muy despistados, muuuuy despistados. Yo en lo particular me distingo por ser especialmente distraído. Por eso cuando descubro cosas me sorprendo mucho y me siento bien. Hace no mucho me contaron que puedo provocar placer, que puedo provocar de esas reacciones físicas que sólo se obtienen haciendo las cosas correctas en el lugar y el momento preciso. Me sorprendí mucho y me llené repentinamente de un sentimiento como que de suficiencia y satisfacción que no me cabía.
10.- Ajem...el pasado pensamiento me ha excitado, por decirlo de manera eufemística. Lo bueno es que nadie lo notó en el hospital...¿verdad?