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miércoles, septiembre 11, 2002

Año 1
Hay catástrofes que marcan a la sociedad de una generación. Mi generación (clase del '85) ha sido marcada muchas veces. Los que nacimos aquí en Guadalajara sentimos el sobresalto del temblor del 19 de Septiembre del 85 con algunos meses de nacidos, yo apenas tenía 6 días en el mundo. Después vino el 88, del que ningun joven de mi edad recuerda, pero que fue clave para el futuro de México, el 6 de Julio esocgíamos de manera demasiado polémica a Carlos Salinas como presidente. En 1992 la cosa se puso fea cuando una buena parte de mi Guadalajara querida voló por los aires cortando la vida a unas 2 mil personas...en el 92 el mundo aun no conocía de ataques terroristas, así que lo que explotó fue culpa de una gasolinera en mal estado. A lo largo de los años siguieron presentandose hechos, catástrofes y personas que cambiaron en sobremanera la forma de ver del mundo y que influyeron en el desarrollo de mi generación. El más reciente y el que verdaderamente fue un parteaguas para mi g eneración fue el famoso S-11.
Motivo de todos los especiales, noticia desde hace un año, motivo de exacerbación nacionalista, fecha de conmemoración para todas las ligas deportivas, razón para la guerra.
Bueh...yo soy un soñador, como me dice mamá. Me acuerdo que desd niño me enseñó a respetar las creencias e ideas de los demás. El derecho de Autodeterminación pues. Los gobiernos de EUA se han encargado de enseñarle al mundo que la Autodeterminación le vale un reverendo pito...no se cuando empezó esa manía, pero la mas vieja intervención gringa de la que tengo conocimiento fue en México en 1847...y de hí pal real...ahora le tocó a Afganistán y sigue Irak...vaya afán de decidir por todo el mundo el de los presidentes de EUA.
En fin...creo que no nos queda de otra mas que levar la mirada al cielo y pensar que hay alguien mas poderoso allá arriba (cosa que no creo mucho, pero que valdría la pena intentar) y quizás pedir por que este caos no pase a mayores.
A un año...solo nos quedan recuerdos de polvo y llanto,
a un año nos vienen las imágenes de un ícono desvaneciendose,
a un año nos viene el mismo amargo sabor en la boca,
a un año aun siento el polvo de la destrucción en mis pulmones,
a un año todavía lloro por los que murieron,
a un año me asombró por los que se animaron a hacerlo,
a un año me viene el dolor de cabeza provocado por el monstruoso sonido de las bombas caer,
de las torres colapsarse,
de los aviones acercarse,
del presidente declarando la guerra,
de la explosión de palabras,
de imágenes,
de sonidos.
A un año de la tragedia...in memorian de los caídos.