El Papa

Karol Wojtyla, el infalible Juan Pablo II, está en estos momentos internado en el hospital Gemelli de Roma, por "una recaída de una gripe" según CNN.

Los medios y el Vaticano en general han sido muy cuidadosos al momento de hablar del estado de salud del Papa. A eso del medio día de México, cuando empezaron a fluir las noticias sobre la recaída de Juan Pablo II, se comentaba únicamente de un pequeño problema respiratorio, mismo que un par de horas después derivaría en una traqueotomía, y de la que después de tantos diagramas expuestos en tantos noticieron ya podemos hacer en la comodidad de nuestras casas.

Hasta el momento no se ha aclarado si el Papa entró al policlínico consiente o no, lo cual podría darnos la pauta de lo que podría ser en próximos días la evolución del pontífice. La traqueotomía no es una medida terapéutica, como los medios han tratado de hacer ver, sino una solución desesperada de un problema mayúsculo. Este procedimiento médico implica conectar al Papa a un respirador artificial, ¿y luego qué?

Estamos acostumbrados a vivir con Papa...al menos mi generación lo está. Los ajetreados días de 1978 en los que se llegó a tener tres papas en un mes yo lo vi en un libro de historia. ¿Qué pasaría ante una eventual muerte de Juan Pablo II? Ya desde hace muchos años (pues desde hace años se espera la muerte del Papa) la grilla cardenalicia está que arde. En El Código DaVinci de Dan Brown vienen algunas pistas sobre cuál es el proceso del cónclave para elegir al sucesor en la silla de Pedro, ¿quién podrá ser? El Papa polaco rompió muchos paradigmas dentro de la política vaticana sin dejar de ser el instrumento del conservadurismo católico de raigambre. El que venga, quienquiera que sea, tendrá una dura labor tras de sí: modernizar a la iglesia católica.

Hoy en todo el mundo se vive una jornada de oración como hacía tiempo no pasaba. Desde los tiempos de Paulo VI, cuando entró en agonía de muerte, o antes incluso, si contamos el atentado contra la vida de Juan Pablo II en 1981.

Mi pronóstico sobre el Papa es reservado. Creo que el respirador artificial al que ha sido conectado no es controlado por los doctores del policlínico Gemelli, sino por el Sacro Colegio Cardenalicio, que en el momento preciso decidirá el descanso de Karol Wojtyla, el infalible venido de Cracovia.